Páginas

07 marzo 2013

BAJAS MÉDICAS: MIEDO Y CONTROL

Este es el contenido de nuestro artículo de opinión sobre las bajas médicas publicado en EL PERIÓDICO de 5 de marzo de 2013.



El notable descenso en el número de procesos de incapacidad temporal (I.T.) obedece a diversas causas. Como primera hemos de mencionar la crisis, evidentemente. Si disminuye la población protegida -esa lacra llamada desempleo- lo lógico es que también se causen menos bajas médicas. La reforma laboral también incide en el descenso. El nuevo artículo 52 d) del Estatuto de los Trabajadores permite al empresario despedir con una indemnización de 20 días por año en caso de «faltas de asistencia al trabajo, aun justificadas pero intermitentes». Y está claro que se alude a las bajas médicas por enfermedad común.

Además, existe otra causa, oculta para muchos, pero visible para los enfermos. Es el estricto control administrativo de los procesos de I.T., que radica fundamentalmente en el Institut Català d'Avaluaciones Mèdiques (ICAMS), organismo autónomo de carácter administrativo, adscrito al Departament de Salut, que entre otras funciones hace informes médicos en materia de control de procesos de incapacidad temporal y de evaluación de la capacidad funcional en materia de incapacidad permanente, a petición de mutuas de accidentes de trabajo y del propio INSS.

Visto así, no parece que la actividad del ICAMS sea negativa o que comporte perjuicio alguno al ciudadano. Pero en la práctica su control -especialmente en materia de incapacidad permanente- está sujeto a criterios económicos, y no a la prestación de servicios sanitarios propios de los organismos adscritos al Departament de Salut. Por eso no es infrecuente que ante ciudadanos enfermos, y que cuentan con informes emitidos por especialistas, se les expida alta médica por el ICAMS, en labores de Inspección Médica, evitando que puedan causar nueva baja en seis meses, situación que puede ser muy angustiosa. Y esa actuación, además de incorrecta e injusta, se basa en criterios económicos. ¿Quieren pruebas? Las tenemos:


1) En el BOE del 4 de octubre del 2010 se publicó un convenio entre el ICAMS y el INSS por valor de 5.667.189,84 euros para desarrollar determinadas estrategias de gestión para mejorar la prestación de incapacidad temporal y estudiar el comportamiento de los procesos de corta. Objetivo: la reducción de los periodos de I.T. de corta duración.


2) Anualmente, el INSS asigna cantidades exorbitantes para financiar la actividad del ICAMS. Así, para el 2009 (pero con proyección al 2010, 2011 y 2012), a Catalunya le correspondería la cantidad de 52.296.062,65 euros. Cito este año porque desde entonces han intentado ocultar tanto las cuantías como las acciones a desarrollar. De esta forma, en aquel convenio del 2009 se establecía: a) un mínimo de 89.562 reconocimientos a trabajadores en I.T.; b)reducción de la duración estándar de los procesos de I.T.; determinados porcentajes de altas médicas, en algún momento, llegaba hasta el 46%.

Atendiendo a todo lo expuesto, es evidente que el derecho a la propia salud ha quedado supeditado a criterios de naturaleza estrictamente económica y de preeminencia del interés de administraciones y empresas. ¿No se lo pensarían ustedes a la hora de solicitar la baja?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Te contestaré lo más rápido que me sea posible, pero ten paciencia. Mi opinión no sustituye la de un profesional jurídico que pueda asesorarte directamente y examinar documentación.