En anteriores entradas de este blog (ACCESO AQUÍ) ya explicamos que el Estatuto de los Trabajadores establecía en su art. 38.3, adaptaba la doctrina establecida entre otras por la sentencia del TS de 3 de octubre de 2012 (R.249/09), dictada por el Pleno de la Sala tras la respuesta del Tribunal de Justicia de la Unión Europea ( STJUE de 21 de junio de 2012 [C-78/11 ]) a la cuestión prejudicial planteada mediante Auto de 26 de enero de 2011 , y seguida ya, al menos, por STS de 29 de octubre de 2012 (R. 4425/12 ), y que en definitiva establecía: “En el supuesto de que el período de vacaciones coincida con una incapacidad temporal por contingencias distintas a las señaladas en el párrafo anterior que imposibilite al trabajador disfrutarlas, total o parcialmente, durante el año natural a que corresponden, el trabajador podrá hacerlo una vez finalice su incapacidad y siempre que no hayan transcurrido más de dieciocho meses a partir del final del año en que se hayan originado”.
Sin embargo, dicha regulación solo era de aplicación a los trabajadores por cuenta ajena sujetos a relación laboral, existiendo un vacío legal respecto al personal funcionario, ya que no existía previsión al respecto en la Ley del Estatuto Básico del Empleado Público. Sin embargo, se ha publicado la Resolución de 22 de julio de 2015, de la Secretaría de Estado deAdministraciones Públicas, por la que se modifica la de 28 de diciembre de 2012, por la que se dictan instrucciones sobre jornada y horarios de trabajo del personal al servicio de la Administración General del Estado y sus organismos públicos, que mimetiza lo dispuesto en el art. 38.3 ET y extiende, ahora ya sí, al personal funcionario el derecho a disfrutar los periodos de vacaciones que no pudieron realizarse por cuestión de incapacidad temporal -aunque lo extiende también a otros motivos, como maternidad, riesgo durante el embarazo, etc.. .